viernes, 31 de julio de 2009

Un dia como Hoy...

Un día como hoy, estabamos 5 familias en la embajada española, eserando el visado para que nuestros hijos pudieran salir sin problemas del país.

Estaba canasada, llevaba 12 días en el país que habia visto nacer a mi hijo, 12 solo a suero, sin comer, al principio por lo nervios y luego estaba tan debil que cuando pude comer, me sento tan mal que me puse mala, estaba exhausta, no me importaba no dormir, para darle el bibe a Tariku, pero ya estaba cansada animicamente, habian pasado 12 días, en un país del cual todavia recuerdo, su olor, sus miradas, su color, su magia...

Para ese mismo día yo tenia el vuelo de regreso a casa, tenia el vuelo por la noche, y sinceramente fue lo mas acertado, Tariku durmio toda la noche y nosotros también, llegamos a Amsterdam por la mañana y en poco mas de una hora rumbo a Madrid, cuando llegue a Madrid todavia nos quedaba otro avión para llegar a casa, pero ya me sentia como si estuviera en casa, la verdad es que fue algo muy extraño, me sentia aliviada porque ya todo el mundo hablaba mi idioma, ya no me sentia una extraña.

El último y tan ansiado avión que nos llevaba para casa se retraso un poquito y ya eso era un problema porque ibamos a llegar justo a la hora del siguiente biberon de Tariku y ya no teniamos agua caliente, llegamos y cuando esperamos las maletas y me tropece con las chicas dando propaganda para sitios turisticos de la isla, me sento en casa.

A fuera nos estaban esperando la abuela, el tio, los padrinos, yo le pedi al resto de los amigos y familiares que no fueran y tambien habia sido una decision muy acertada, porque llegamos tan canasados, que no hubieramos podido soportarlo, es curioso porque en Etiopía o aquí antes de salir todavía no habia llorado, y fue en ese momento en el que salí con mi bebé en brazos y lo estiré hasta los brazos de mi madre, cuando me derrumbe y empece a llorar, lloraba yo, lloraba mi madre, mi comadre, en ese momento habian muchas emociones y muchos sentimientos en el ambiente que la alegria y las nueva ilusiones que iban a llegar se podia palpar en el ambiente.

7 comentarios:

  1. Tiene lógica. Toda esa emoción, toda esa tensión salió al sentirte en casa, al ver a tu gente con tu hijo en brazos. Seguro que llorar te hizo mucho bien, porque era un llanto de "ya está, ya pasó, ya estamos los dos en casa"
    Mil besazos!
    Mar

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  2. Me encanta cómo narras lo que sentías paso a paso... yo quiero vivir esa experiencia Yaaaaaaaaaaaaaaa!!!!
    Mil besos a los dos.

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  3. Supongo que hacerse la fuerte, lejos de casa, fue acumulando emociones que no se desataron hasta que viste a tu madre... :-) Qué recuerdos más intensos que explicas... uffff...
    Un beso,
    Mariajo

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  4. Me encanta como lo cuentas!!! parece que lo estoy viendo!!!
    Besos

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  5. y yo tambien llore jajajaja.. tia en cada entrada q haces llorooooo jaja pq???? jajajaja.. sigue contandooo ehhh besossssss

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  6. Ida, vete pensando ya en serio lo del libro!!! Mira como todo el mundo dice que emocionas... Amaira y yo te compramos el primero...y nos lo firmas :D

    Fdo: El tio!!

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  7. me emociono cuando leo vuestras experiencias, es una pasada, tengo unas ganas de vivir algo así!!!

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